Madres desesperadas arrojaron bebés sobre alambre de púas en el aeropuerto de Kabul
A medida que pasan los días, la operación de socorro se vuelve cada vez más urgente y desesperada, ya que el ejército británico intenta sacar a miles de personas de Afganistán en solo unos días.
El oficial británico dice que no todos los bebés llegaron a un lugar seguro; miles varados en tierra de nadie entre combatientes talibanes y tropas occidentales
Miles de afganos se amontonaron hoy jueves en los puestos de control de los talibanes y un anillo impuesto por Estados Unidos alrededor del principal aeropuerto de Kabul, desesperados por abordar cualquier vuelo, luego del regreso del grupo islamista al poder.
En algunos casos, las mujeres desesperadas recurrieron a arrojar a sus propios bebés sobre alambre de púas a los soldados británicos dentro del aeropuerto, informó Sky News.
El medio con sede en el Reino Unido citó a un oficial anónimo diciendo que no todos esos intentos tuvieron éxito.
“Fue terrible, las mujeres arrojaban a sus bebés por el alambre de púas, pidiendo a los soldados que se los llevaran, algunos quedaron atrapados en el alambre”, dijo. “Estoy preocupado por mis hombres, estoy asesorando a algunos, todos lloraron anoche”.
The Independent citó a un oficial del Regimiento de Paracaidistas dando una descripción similar.
“Las madres estaban desesperadas, los talibanes las golpeaban. Gritaron, ‘salva a mi bebé’ y nos tiraron a los bebés, algunos de los bebés cayeron sobre el alambre de púas. Fue terrible lo que pasó. Al final de la noche no había un solo hombre entre nosotros que no llorara ”, dijo.
Mientras tanto, los afganos acosaban los recintos de las embajadas extranjeras en la capital, a medida que se difundían los rumores de que las visas estaban disponibles o se ofrecían un pasaje seguro al menos hasta el aeropuerto.
Informes no confirmados en las redes sociales dicen que varias personas han sido asesinadas, mientras las fuerzas estadounidenses y los talibanes luchan por contener a las multitudes desesperadas en sus respectivos lados de una tierra de nadie no oficial.
“Fui al aeropuerto con mis hijos y mi familia … los talibanes y los estadounidenses estaban disparando”, dijo un hombre, que hasta hace poco había trabajado para una ONG extranjera. “A pesar de eso, la gente seguía avanzando [para entrar] porque sabían que una situación peor que la muerte les esperaba fuera del aeropuerto”.
Ha habido escenas caóticas desde el fin de semana, cuando los talibanes entraron sin oposición en la capital después de una ofensiva relámpago de dos semanas que culminó con una insurgencia de 20 años.
Han surgido imágenes y videos angustiosos de personas que intentan desesperadamente abordar cualquier vuelo que salga, incluso recurriendo a subirse a un Hércules militar estadounidense mientras rodaba por la pista para despegar.
Se ha restablecido algo parecido al orden, pero miles se han quedado varados entre los talibanes y las líneas estadounidenses, aferrándose a una esperanza poco realista de que los dejarán entrar y los evacuarán.
Muchos tienen visas para un destino en el extranjero, y dicen que se les prometió evacuaciones, pero simplemente no pueden ingresar.
“Hablé con mi amigo que está allí y tiene una carta de España que dice que puede irse con ellos, pero cuando intenta ir a la puerta lo amenazan con dispararle”, dijo un hombre que pidió no ser identificado. AFP. “Los españoles le dicen que si entra, estará bien, pero no puede entrar”.
Los talibanes han proporcionado escoltas oficiales para algunas embajadas extranjeras, llevando a sus nacionales y afganos, y los estadounidenses los están permitiendo.
Pero incluso ese viaje, que puede durar varias horas y solo unos pocos kilómetros, está plagado de angustias.
“Había gente golpeando las ventanas del autobús, tratando de entrar”, dijo una mujer que logró pasar el miércoles. “Los talibanes que estaban con nosotros dispararon al aire para ahuyentarlos”.
También hubo desesperación cerca del enclave diplomático el jueves, ya que miles de personas clamaron por llamar la atención de cualquiera en las embajadas, ahora en gran parte desiertas.
“Me dijeron que si obtenía mi nombre, mis datos y mi teléfono en un papel en la embajada de Francia, me llevarían”, dijo un hombre.
Cientos de personas se sentaron en las aceras pidiendo trozos de papel o un bolígrafo prestado para hacer lo mismo.
Washington dijo el miércoles que los talibanes estaban incumpliendo sus promesas de permitir que los afganos que trabajaban con Estados Unidos y sus aliados salieran del país.
“Hemos visto informes de que los talibanes … están impidiendo que los afganos que desean salir del país lleguen al aeropuerto”, dijo a la prensa la subsecretaria de Estado Wendy Sherman.
“Esperamos que permitan que todos los ciudadanos estadounidenses, todos los nacionales de terceros países y todos los afganos que deseen irse lo hagan de forma segura y sin acoso”.
Fuente: The Times Of Israel / Sky News
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