Radio JAI

La Radio Judía de Latinoamérica

DONAR

Herodes I el Grande, Rey de los judíos

Herodes I el Grande

Herodes I el Grande, Rey de los judíos, que fue hijo de un idumeo y de una nabatea, era en realidad un palestino de cultura helenística consagrado al servicio de Roma, que dominaba Palestina desde que fuera conquistada por Pompeyo en el 63 a.e. C.).

Fue nombrado primero gobernador de Galilea y posteriormente «tetrarca» para dirigir las relaciones de Roma con los judíos; pero tuvo que huir ante el ataque de los partos, que apoyaban en el trono a Antígona, la última reina de la dinastía de los Asmoneos o Macabeos, representante de la resistencia judía contra la dominación política y cultural del Occidente grecorromano.

En el año 40 a.e. C. el Senado romano nombró a Herodes rey de los judíos por indicación de Marco Antonio, con la misión de recuperar Judea de manos de Antígona. Herodes combatió durante tres años hasta que conquistó Jerusalén y decapitó a Antígona.

Su ilegitimidad dinástica y su indiferencia religiosa le hicieron impopular entre los judíos, especialmente entre el partido religioso ortodoxo de los fariseos. Por ello estableció un régimen basado en el terror, con una persecución sangrienta de la antigua familia reinante, la cual incluyó el asesinato de su esposa Asmonea, su suegra, su cuñado y tres de sus hijos.

Fue un rey hábil que supo eludir su participación en la batalla de Actium, lo que permitió que Augusto le mantuviera en el trono después de su victoria, con una autonomía política prácticamente total a pesar de ser vasallo del Imperio.

Defendió eficazmente el reino frente a los ataques de partos y árabes; construyó ciudades y fortalezas; embelleció la capital; respetó las costumbres locales y comenzó la reconstrucción del Templo de Jerusalén.

Al morir dejó el reino dividido entre sus hijos: Judea, Samaría e Idumea para Arquelao, destituido dos años después por el gobernador romano Poncio Pilato, y Galilea y Perea para Herodes Antipas (el que, según los Evangelios, eludió juzgar a Jesús cuando se lo envió Poncio Pilato).

Su nieto, Herodes Agripa I, fue el último rey que gobernó sobre la totalidad de Palestina y el que, según el relato de San Lucas en los Hechos de los Apóstoles, hizo encarcelar a San Pedro y condenó a muerte a Santiago Apóstol. Bajo el reinado de su hijo Herodes Agripa II estalló la rebelión de los judíos que llevó a la destrucción de Jerusalén por el emperador Tito y la anexión de Palestina a Siria como provincia romana (70 E. C.).

Herodes huyó a Roma, donde el senado le nombró Rey de Judá. Con ayuda romana, pudo ocupar Jerusalén en el año 37 a.e. C., asegurando su posición política con el matrimonio con Marianne, nieta de Hircano. Asimismo, logró que Marco Antonio condenara a muerte a Antígono, con lo cual Herodes I quedó dueño de la situación. Más tarde se ganó el favor de Octavio Augusto, tras la derrota de Marco Antonio en Accio, recibiendo del nuevo dueño de Roma otros territorios.

Su reinado, a partir de aquel momento, se centró en una febril actividad constructora: fundó ciudades nuevas de corte helenístico y fortalezas (Herodion de Belén, Herodion de Transjordania), y reconstruyó, reformó o embelleció otras, como el templo de Jerusalén, que superó en magnificencia al antiguo de Salomón.

Aunque Herodes I no era judío, respetó las costumbres e ideas del pueblo, especialmente las mantenidas por los fariseos. Su reinado, repudiado por la población debido a la carga impositiva, se vio complicado por serios problemas familiares, a los que Herodes I hizo frente empleando una gran crueldad, como el asesinato de su esposa Marianne y de sus hijos Alejandro y Aristóbulo, además del de otros familiares. En sus últimos años de gobierno cometió numerosos asesinatos y sufrió la conspiración de uno de sus hijos, Antípater, al que había tenido con Doris. Desarrolló proyectos constructivos colosales, entre los que están la expansión del Segundo Templo de Jerusalén (el Templo de Herodes), la construcción del puerto de Cesarea Marítima y las fortalezas de Masada y Herodión. Sobre su biografía hay detalles en la obra del historiador romano-judío del siglo I Flavio Josefo.

Herodes también aparece en los evangelios como el gobernante de Judea que ordenó la matanza de los Inocentes en la época del nacimiento de Jesús.

Herodes I murió en el año 4 a.e. C., equivalente al 10 de enero de la e.c, sin que se llegaran a ejecutar sus últimas órdenes criminales; acuchillamiento de los judíos notables reunidos en el hipódromo de Jerusalén.

 

Por el Dr Mario Burman

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Radio Jai

Ayuda a RadioJAI AHORA!
HAZ CLIC AQUÍ PARA HACER UNA DONACIÓN