Herzog le dice a la coalición que abandone su paquete de revisión ‘opresivo’ y busque el consenso

Al denunciar la crisis de ‘pesadilla’ sobre la renovación judicial, el presidente dice que el paquete legislativo actual socava la democracia y afirma que ha llegado a un acuerdo tras bambalinas en la mayoría de los temas

Por Jeremy Sharon/ The Times of Israel

El presidente Isaac Herzog denunció el jueves por la noche la legislación de reforma judicial del gobierno como “opresiva” y dañina para la democracia, y pidió que se abandone de inmediato y se reemplace por un marco de reforma consensual.

En un discurso especial a la nación pronunciado en tonos duros y graves, el presidente dijo que la crisis nacional por el esfuerzo de la coalición para debilitar el poder judicial era “un desastre” y “una pesadilla”. Insistió en que era responsabilidad de “los líderes del estado” en el gobierno dejar de lado la carga legislativa vertiginosa para que el país no descienda a un abismo social y constitucional.

El contundente discurso de Herzog marcó la primera vez que se pronunciaba abiertamente en contra de un bloque político durante la actual crisis política y, al igual que los partidos de oposición de la Knesset, se opuso sin ambigüedades a los proyectos de ley del gobierno por considerarlos antidemocráticos.

Durante su discurso, el presidente anunció que en sus conversaciones con representantes de ambos lados de la división política ha logrado crear una fórmula de acuerdo sobre la mayoría de las grandes disputas en el centro de la crisis, y dijo que esto debe perfilarse debe ser pasó al Comité de Constitución, Ley y Justicia de la Knesset para su debate en lugar de la actual legislación de rápido avance del gobierno.

Pero Herzog agregó que tanto la oposición como la coalición necesitaban poner al país por encima de la política para evitar que Israel “caiga por el borde del precipicio”.

Hablando en la Sinagoga Española de Roma durante una visita a Italia poco después del discurso de Herzog, el Primer Ministro Benjamin Netanyahu dijo que da la bienvenida a “todas las iniciativas” para encontrar un acuerdo y un terreno común, incluida la de Herzog.

“Debemos recordar eso, especialmente en estos días, días de discusión y debate dentro de Israel, debemos recordar que somos una nación con un futuro común”, dijo Netanyahu entre aplausos. “Todos somos hermanos. Hermanos y hermanas.”

Los comentarios del presidente se produjeron cuando la coalición estaba lista para embarcarse la próxima semana en lo que parece ser un impulso decidido para promulgar los primeros elementos centrales de su paquete radical de reformas legales y judiciales, y en el contexto de protestas masivas y disturbios en todo el país el jueves.

“El paquete de legislación que se está discutiendo actualmente en el Comité [Constitucional] debe desaparecer, y rápidamente”, entonó Herzog.

“Está mal, es opresivo, socava nuestros cimientos democráticos. Y por lo tanto, debe ser reemplazado por otro plan, uno que tenga consenso, y de inmediato”, continuó.

“A los líderes del país, de la coalición y del gobierno les digo: estamos en el punto de no retorno. Este es un momento para ser o desistir: para elegir el consenso y realizar un momento constitucional fundacional que crecerá y nos fortalecerá durante los años y las generaciones venideras, o para deteriorarse en un abismo constitucional, de seguridad, social y económico”.

Herzog dijo que había estado trabajando en propuestas alternativas durante las últimas diez semanas en discusiones con jugadores de todos los lados del espectro político e ideológico, y que esas discusiones habían dado sus frutos.

“Pude generar una situación en la que las brechas se han reducido considerablemente. Hay acuerdo en la mayoría de los temas. Cierto, no en todo, pero sí en la gran mayoría”, declaró el presidente, y dijo que la legislación del gobierno, algunas de las cuales ya se aprobaron en primera lectura en el pleno de la Knesset y algunas que ahora están listas para una primera lectura, podría ahora ser puesto a un lado.

“Ciertamente”, dijo el presidente, se había acordado lo suficiente hasta ahora “para abandonar la legislación que se está avanzando actualmente y traer, en cambio, a las discusiones en el Comité de Constitución, Ley y Justicia de la Knesset, un marco acordado diferente”.

Existe la base, dice, “para una suma rápida, en la que los únicos ganadores son el Estado de Israel y sus ciudadanos”.

Herzog especificó los valores supremos que deben salvaguardarse: “Nuestra democracia es un valor supremo. Un poder judicial independiente y fuerte es un valor supremo. La preservación de los derechos humanos, tanto para hombres como para mujeres, con énfasis en las minorías y el especial y rico mosaico israelí, son un valor supremo”, dijo, destacando el punto de vista de la oposición.

“Sí, diversificar el sistema judicial para que sea un hogar para todos los ciudadanos también es un valor supremo”, agregó, en un guiño a la posición de la coalición.

“Y también es un valor supremo una relación sana, estable y clara entre los poderes del Estado”, subrayó.

Dijo el presidente: “Esta es una fórmula posible. Esta es una fórmula a nuestro alcance”.

“Ahora debe tomar una decisión, tanto la coalición como la oposición, si el Estado de Israel y sus ciudadanos están por encima de todo, o si los egos y los intereses políticos estrechos nos arrojarán al borde del precipicio”, concluyó Herzog.

“Hay una opción: farsa o una solución. Si eliges el camino que has recorrido hasta ahora, el caos caerá sobre ti. La historia te juzgará. Asume la responsabilidad de inmediato”.