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Moritz Hochschild el Schindler Boliviano

Moritz Hochschild era uno de los empresarios mineros más famosos en la primera mitad del siglo XX. Junto a Simón I. Patiño y Carlos Aramayo, fue uno de los tres llamados barones bolivianos del estaño. Nació en 1881 en Biblis (Alemania) y falleció en 1965 en Francia. Tuvieron que pasar casi cuatro décadas para que se diera a conocer su lado más humanitario. Moritz Hochschild conocido como Mauricio Hochschild. Nació en una familia judía, dedicada a la industria minera durante más de una generación. Era el hijo mayor de un comerciante que tenía dos primos involucrados en la industria del metal, los hermanos Berthold Hochschild, que fundaron American Metal Company y Zachary Hochschild, socio de Metallgesellschaft.

Después de que Hochschild se graduó de la escuela, estudió minería e ingeniería en la Universidad de Minería y Tecnología de Freiberg. En 1905, comenzó a trabajar en el conglomerado industrial Metallgesellschaft y luego continuó su trabajo como agente de la compañía en España y Australia. Después se mudó a Sudamérica para trabajar de manera independiente. Al cabo de varios años en Chile, regresó a Alemania, donde fue voluntario en el ejército con un trabajo burocrático en la Primera Guerra Mundial.

Un Imperio en Bolivia

En 1918 se casa con Käthe Rosenbaum con quien en 1919 regresa una vez más a América del Sur. En 1920 nace su hijo Gerardo Hochschild Rosenbaum.

Desde que era estudiante escuchaba de Simón Patiño y la fortuna que acumulaba por la venta de estaño y en 1922 Hochschild se traslada a Bolivia, en 1924 fallece su esposa de tuberculosis.
Durante las siguientes dos décadas, Hochschild construyó un imperio económico en Bolivia en torno a la explotación minera y el comercio del estaño. Su imperio se extendía desde el Perú hasta Chile. La década de 1930 vio el apogeo de la influencia económica y política del Grupo Moritz Hochschild.

El Schindler de Bolivia

En 1938, utilizando su influencia con Germán Busch (presidente militar de Bolivia de 1937 a 1939), Hochschild empujó a Bolivia a abrir sus puertas a los refugiados judíos de la Alemania de Hitler. Aproximadamente 9,000 fueron admitidos. Hochschild también financió el transporte de los refugiados y sus viviendas una vez que llegaron al país sudamericano. Los periódicos lo han llamado “Schindler de Bolivia”.

Durante la Segunda Guerra Mundial fue un proveedor de estaño y otros materiales para las fuerzas aliadas.

Tanto en 1939 como en 1944, Hochschild fue arrestado por el gobierno boliviano y sentenciado a muerte. Solo dos semanas después de la liberación después de su arresto en 1944, fue capturado y secuestrado durante dos semanas. Después de que fue liberado, salió de Bolivia y nunca regresó.

En 1951, los Hochschilds donaron la mayor parte de su fortuna al Fondo y Fundación Hochschild. En el año siguiente, el Grupo Moritz Hochschild fue nacionalizado durante la Revolución Nacional Boliviana.

Moritz Hochschild murió en 1965 en París

El archivo documental de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) preserva documentos que dan fe de la labor filantrópica del magnate alemán durante el ascenso del nazismo en Europa. Gracias a sus gestiones, se estima que entre 1938 y 1940 llegaron a Bolivia más de 9.000 judíos que se salvaron del Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial.

Según León Bieber, historiador boliviano de origen judío, la inmigración a Bolivia se da durante momentos previos y durante la Segunda Guerra Mundial. Dice que es una coincidencia interesante que la nación andina haya abierto sus puertas irrestrictamente mientras en Alemania acontecían sucesos lamentables como la denominada Noche de los cristales rotos, en 1938, cuando se lanzó una revuelta contra ciudadanos y negocios judíos, además de sinagogas y cementerios.

Las buenas relaciones de Hochschild con el entonces presidente boliviano, permitieron que por medio del Comité Judío Americano de Distribución Conjunta (Joint, por sus siglas en inglés) llegaran al país inmigrantes judíos con visas para realizar trabajos de agricultura, siendo la mayoría de ellos intelectuales, artistas y profesionales de otras áreas. “Lo que hizo Hochschild fue crear dos instituciones básicas: la Sociedad de Protección a los Inmigrantes Israelitas, a través de la cual fueron canalizados los fondos que el Joint ponía a disposición para ayudar a aquella población y la Sociedad Colonizadora de Bolivia. Él fue realmente el artífice para integrar a los judíos en el país. Estas instituciones creadas por Horschild dieron también protección a sobrevivientes de Auschwitz, Majdanek, Bergen-Belsen y Trevlinka.

Reproducción autorizada por Radio Jai citando la fuente.

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Radio Jai

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