Los muertos en Israel ya son cinco y la cantidad de contagiados asciende a 2.170

El Ministerio de Salud dijo el miércoles ya son cinco personas las personas que han muerto en Israel como consecuencia del coronavirus.

Según informaron los medios israelíes, la quinta víctima fue un hombre de 87 años que llegó al Centro Médico Mayanei Hayeshua en Bnei Brak el martes con dificultades para respirar, lo cual demuestra un avance considerable de la enfermedad para aquel momento. Se comprobó que padecía el COVID-19 después de su muerte.

El Centro Médico Sheba en Tel Hashomer anunció la muerte de un hombre de 76 años, la cuarta muerte de Israel por COVID-19. Según los informes, el hombre tenía graves problemas de salud antes de contraer el virus, lo cual generaba una mayor dificultad para poder tratar al paciente.

El Ministerio de Salud anunció el miércoles por la tarde que el número de personas diagnosticadas con coronavirus en Israel es de 2170, un aumento de 240 desde el martes, que había visto el mayor aumento en un solo día de los casos desde que comenzó la crisis.

Según el ministerio, 37 personas con COVID-19 están en estado grave y 54 en estado moderado. Otras 1876 personas tienen síntomas leves.

Ahora ha habido 58 israelíes que se han recuperado del virus.

De los infectados, 203 están siendo tratados en hospitales, 927 están aislados en sus casas y 203 en hoteles que han sido reutilizados como salas de coronavirus.

El aumento en los casos ha venido junto con un aumento en la cantidad de pruebas para el virus, con 5,067 personas examinadas entre el martes por la mañana y el miércoles por la mañana. El martes por la mañana, el ministerio dijo que había testeado a 3743 individuos en el período anterior de 24 horas.

Más de 63000 israelíes están en cuarentena, por debajo de los casi 75000 reportados el lunes. En total, más de 140000 han pasado tiempo en autoaislamiento.

El Centro Médico Hadassah Ein Kerem de Jerusalem anunció el martes por la noche la muerte de la tercera víctima del virus en Israel, un hombre de 87 años.

El hombre fue llevado al hospital a principios de esta semana desde la residencia para adultos mayores donde vivía, después de dar positivo por el virus, dijo el hospital. Tenía una serie de problemas médicos subyacentes, como diabetes y demencia, agregó en un comunicado.

Fue el segundo residente de las instalaciones de vivienda asistida de la Torre Nofim en Jerusalén en sucumbir a la enfermedad.

El primero fue Aryeh Even, de 88 años, quien murió el viernes.

También el martes, Malka Keva, una mujer de 67 años de la ciudad costera de Bat Yam, murió de coronavirus en el Centro Médico Wolfson de Holon, dijo el hospital.

Keva sufría de “una condición médica preexistente grave”, según el hospital. Hace varios años, cayó enferma de cáncer y había estado debilitada cuando contrajo el virus.

Israel está en el puesto 20 en una lista de casos por países afectados por el virus, según datos del sitio web del virus de la Universidad Johns Hopkins , que recopila información sobre el brote global.

China sigue en la cima, seguida de Italia, Estados Unidos y España.

Israel anunció el miércoles que anunciará nuevas restricciones drásticas al movimiento público que espera ayude a detener la propagación del virus, aunque los expertos en políticas esperan que cualquier efecto solo se vea en 10 días o más.

Los funcionarios israelíes aprobaron las nuevas restricciones para detener el brote en la madrugada del miércoles después de unas seis horas de deliberaciones.

Según los informes, las nuevas regulaciones incluirán una prohibición del ejercicio al aire libre y un límite para que los residentes puedan pasear a más de 100 metros de sus hogares.

También pudieron ver nuevas restricciones en la comida para llevar en restaurantes, y el transporte público se redujo aún más si no se detuvo por completo.

La Oficina del Primer Ministro dijo poco después de la medianoche del miércoles que la educación remota se reanudaría esta semana después de que una disputa sobre los salarios de los maestros detuviera las clases durante casi una semana.

El Ministerio de Salud ya ordenó al público permanecer en el interior a menos que sea necesario y prohibió las reuniones de más de 10 personas. Se han cerrado universidades, escuelas, jardines de infancia y sitios de ocio.

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