Radio JAI

La Radio Judía de Latinoamérica

DONAR

No hay peor antisemita que un judío antisemita

Tras las expresiones judeofóbicas del periodista Víctor Hugo Morales y la pertinente denuncia presentada en el INADI por parte del diputado Waldo Wolff, siempre aparecen los oportunistas que demuestran su auto-odio.

Sin esperar la sentencia del organismo contra la discriminación, los habituales operadores “judíos” del kirchnerismo salieron a fustigar al diputado.

De este modo, el “Llamamiento Argentino Judío”, un sello de goma inventado por Jorge Elbaum y algunos miembros de ICUF (una entidad de origen judeo-Stalinista) durante el Kirchnerismo, en una clara muestra de aprovechamiento político y sin representación comunitaria real, emitió un comunicado solidarizándose con el periodista, y acusando a Wolff de victimizarse utilizando la judeofobia “de forma fraudulenta”.

Recordemos que esta agrupación ha acompañado unívocamente todas las posturas del “gobierno nacional y popular de Cristina Kirchner” ya sea en el Memorándum de entendimiento con Irán, la disputa con los fondos buitres donde se calificó a los dirigentes de la DAIA como operadores de los mismos y traidores a la patria o en la campaña de desprestigio contra el fiscal Nisman luego de su asesinato señalando que se trata de un suicidio.

Hay quienes realizan odiosas comparaciones con judíos colaboracionistas de otras épocas. La diferencia es que los mencionados en su mayoría no tenían opción, la alternativa era ser asesinados. En éste caso, se trata o de deformaciones culturales, auto-odio o intereses de dinero y/o poder.

Bajo el liderazgo del ex funcionario kirchnerista, y ex director ejecutivo de la DAIA, Jorge Elbaum, la agrupación siempre se ha caracterizado por el ataque y la descalificación.

Los antisemitas de turno siempre han encontrado en esta quinta columna una manera de mostrar que son incluso apoyados por “judíos” en sus diatribas. Éstos “judíos vergonzantes” o ciudadanos de apellido judío logran en una sociedad desconocedora de la vida comunitaria y donde la impunidad reina,  cuestionar la legitimidad de las entidades comunitarias representativas.

En diálogo con Delia Sisro, quien escribió junto al diputado de Cambiemos el libro “Asesinaron al fiscal Nisman. Yo fui testigo”, la periodista y escritora expresó su repudio y consideró que el ataque a Waldo Wolff es un ataque a todos los judíos.

La democracia como forma de organización social que atribuye la titularidad del poder al conjunto de la ciudadanía, deja de tener sentido cuando un grupo de unos pocos, quienes se posicionan desde un lugar en el que no tienen ni apoyo ni legitimidad en absoluto, dejan de respetar la diversidad ya sea de opinión o de cualquiera de sus formas. Paradójicamente en su declaración de identidad, se manifiestan textualmente “deseosos de contribuir a la profundización de la democracia y la equidad social”.

El Llamamiento Argentino Judío ataca “desde adentro” y no es novedoso sino una práctica constante en sus manifestaciones. Tal como menciona Sisro, sus ataques son sistemáticos y permanentes y destratan a todo judío que no piensa como ellos calificándolo de derecha o “fascista”.

Analicemos esto: Al mencionar a Wolff, lo califican de “macrista” sin siquiera nombrar a qué partido político pertenece. No destaca su identidad real sino la que ellos consideran pertinente mencionar de acuerdo al modo en que desean atacar en esta oportunidad.

Su accionar parte -analiza Sisro- de una falta de reconciliación con sus propias condiciones. El “auto odio” existió a lo largo de la historia y tiene que ver con no sentirse identificados, sentirse rechazados o por algún despecho. “Tendrían que charlarlo en su terapia o con sus seres queridos y evaluar por qué actúan así”, expresa la referente y destaca que el problema no es pensar diferente, eso es lo “normal”. El conflicto reside en la necesidad de agredir al otro pero, el Llamamiento, siempre utilizó esta forma de expresión demostrando que -concluye Sisro- “no es muy fuerte su idea” por eso utilizan ese único camino.

La elección de Wolff no es casual. Es una doctrina del “Llamamiento” que intenta enviarle un mensaje a todos los judíos agrediendo a aquel que es visible, de modo que el resto de los pares entiendan que si esto, el ataque a viva voz, le ocurre a una figura pública, “imaginen lo que les pasará al resto que osen actuar o pensar como él”.

“Cuando se ataca un judío nos están atacando a todos”, sentencia Sisro.

 

A CONTINUACIÓN EL COMUNICADO DIFUNDIDO POR EL LLAMAMIENTO ARGENTINO JUDÍO CONTRA EL DIPUTADO WALDO WOLFF:

 

Reproducción autorizada por Radio Jai citando la fuente.

Reproducción autorizada citando la fuente con el siguiente enlace Radio Jai

Ayuda a RadioJAI AHORA!
HAZ CLIC AQUÍ PARA HACER UNA DONACIÓN