Un líder judío no es ‘solo un hombre con barba’, dicen las rabinas al alcalde de Nueva York, Adams

El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, se reunió el jueves con 55 rabinas y cantoras en lo que uno de los rabinos llamó una discusión “productiva y respetuosa” sobre temas que incluían la lucha contra el antisemitismo, el cambio climático, la falta de vivienda, el cierre de Rikers Island , atención médica, vivienda asequible y más.

El clero buscó la reunión a principios de esta semana debido a la preocupación de que los judíos ortodoxos que Adams consulta regularmente no representan la diversidad política o religiosa de la comunidad judía de la ciudad.

Sin embargo, en una conferencia de prensa posterior a la reunión de 45 minutos en el Ayuntamiento, Adams dijo que las mujeres del clero expresaron las mismas preocupaciones que escuchó de la comunidad ortodoxa.

“Quieren calles seguras”, dijo Adams. “Quieren poder tener una vivienda. Quieren asegurarse de que sus hijos reciban educación. Se preocupan por el medio ambiente. Puede haber diferentes formas de lograrlo, pero todos queremos llegar al mismo destino”.

Al señalar que no siempre es fácil “unirse”, Adams dijo que “tenemos que comenzar a comunicarnos y hablar, y lo haré”.

“Me han criticado por reunirme con quienes son diametralmente opuestos a lo que creo, pero voy a seguir haciendo esto”, dijo. “Este es solo el comienzo.”

La rabina Sharon Kleinbaum de la Congregación Beit Simchat Torah, organizadora de la reunión junto con la Agenda Judía de Nueva York y la rabina Rachel Timoner de la Congregación Beth Elohim en Park Slope , dijo que la reunión fue importante para mostrarle a Adams que no todos los rabinos o líderes judíos son “ un hombre con barba.”

“Todos son diferentes”, Kleinbaum, quien dirige su sinagoga LGBTQ en Manhattan desde 1992. “Son personas de color. Son lesbianas, bisexuales y transgénero”.

“Nos escuchó”, dijo Timoner después de la reunión, que calificó de “productiva y respetuosa”. “Estaba tomando notas. Estaba haciendo preguntas para aclarar. Claramente nos estaba pidiendo que nos asociáramos con él”.

Kleinbaum, quien ha trabajado con el Ayuntamiento durante décadas como rabino, dijo que el alcalde era “sincero sobre la construcción de relaciones”.

“No fue una conversación contradictoria”, dijo Kleinbaum. “Estábamos allí para iniciar una relación. Eso es lo importante”.

Timoner le dijo a la Semana Judía de Nueva York que la reunión no se trataba de presionar a Adams sobre temas particulares, sino de comenzar una relación. “Es importante para él escuchar las profundas preocupaciones de la mayoría de los neoyorquinos”, dijo Timoner. “Nosotros representamos eso. No somos superados por nadie, somos los rostros reales del liderazgo judío en Nueva York”.

“En particular”, agregó, “la preocupación era que su administración solo estaba consultando a los líderes haredi [ortodoxos], como si hablaran en nombre de toda la comunidad”.

Las mujeres presentes representaban una muestra representativa de denominaciones judías, así como los cinco distritos de la ciudad. Entre ellos se encontraban la rabina Angela Buchdahl de la Sinagoga Central, la rabanit Bracha Jaffee del Instituto Hebreo de Rverdale-The Bayit y la activista trans y rabina Abby Stein.

Adams contó con un amplio apoyo de la comunidad ortodoxa haredí durante su campaña para la alcaldía debido a sus políticas duras contra el crimen y las relaciones que había construido a lo largo de los años como presidente del condado de Brooklyn . Al menos tres judíos ortodoxos han sido designados para el personal superior de la administración de Adams.

Y, sin embargo, la mayoría de los judíos estadounidenses se han identificado constantemente con el Partido Demócrata en los últimos años, mientras que la minoría ortodoxa se ha inclinado por los republicanos. En el área de Nueva York, la gran comunidad ortodoxa haredi a menudo busca lazos y apoya a los demócratas simpatizantes.

Adams, quien ha oscilado entre posiciones progresistas y conservadoras desde que asumió el cargo en enero, ganó su elección a pesar de perder Manhattan, en promedio el distrito más liberal de Nueva York.

Por Jacob Henry

Fuente:JTA