AMIA: La hora de la interpelación

Por Raúl Woscoff

Cada nuevo aniversario del atentado a la AMIA, además de un recordatorio doloroso que debiera ser cotidiano, es un desafío a la razón. Si, a la razón que debe contribuir a encontrar un camino dónde la mayoría se aferra a un status quo que encubre resignación y temor a nuevos intentos.

Ya no quedan dudas que la opción es el juicio en ausencia, instrumento procesal que permitiría llevar a juicio a los imputados del delito de Lesa humanidad.

Cómo bien se ha dicho navegar en un mar de parálisis e indecisión se ha constituido en una costumbre que nos ha transformado en una sociedad menesterosa de respeto.

Deberíamos aprender de aquellos países que, habiendo sufrido crueles atentados terroristas y después de sufrir desviaciones en las investigaciones, encubrimiento y dilaciones, recuperaron el camino de la justicia.

Ahora nos toca a nosotros.

En el caso AMIA las imputaciones están claras.

La razón nos interpela.

¿Si existe un instrumento legal que nos permite desentrañar la verdad sobre el atentado, como no utilizarlo?

Uno a uno todos los legisladores nacionales, diputados y senadores, deben ser a su vez interpelados por una sociedad que reclama verdad y justicia para que sancionen la ley sobre juicio en ausencia.